sábado, 27 de octubre de 2018

La poesía no está hecha por miedosos;
  son fuertes de corazón
  los que escriben,
  valientes acérrimos
  al drama,
  capaces de devorar y escupir
  verdades como puños,
  palabras.
  Compañeros íntimos de la tragedia.
  Dueños de una delicada sensibilidad
  pero sobre todo dueños.

domingo, 7 de octubre de 2018

[Soy rojigualdo]

Dímelo tú, patria,
de quién soy.
Pregúntamelo en estas aguas
donde yo me encuentro.
¿Soy español, italiano, sirio...?
¿Soy de este gran mar
al que mediterráneo decimos?
Por el recoveco de Estambul
el mar entra en oscuridad
y por el estrecho de Gibraltar
se pierde nuestra solidaridad.
Es, desde el sur,
nuestra tierra una base mustia
habitada por seres grises
hasta el norte,
que refleja si no fielmente,
por nuestra visión cóncava,
los países nórdicos.
Los verdes acantilados
de los estados árticos
donde arrima el pico
uno de nuestros miedos europeos.
Seré yo de mis miedos europeos.
Seré capaz de tenerle miedo
al invierno, que pasa y deja
lugares vacíos, gentes frías,
hojas en el suelo, ideas distintas.
No serán capaces los animales
de soportar nuestras huellas;
de resistir a la fría
glotonería de ego y ambición,
de inconsciencia e irreflexión.
Hay un poco de playa
en la costa de ese basurero.
Así que dímelo tú, patria,
a qué parte del mundo pertenezco.